Los padres de Catalunya reclaman medidas para hacer frente a las altas temperaturas: "Nuestros hijos están sufriendo"

El curso pasado algunos centros escolares de Catalunya superaron los 30 grados en los meses de verano. Para que no se repita lo mismo, la AFA (Asociaciones de Familias de Alumnos) de Barcelona y la AFFaC (Asociaciones Federadas de Familias de Alumnos de Cataluña) han convocado este martes una protesta a las puertas del Consorci d’Educació de Barcelona (CEB) para exigir medidas que hagan frente a las altas temperaturas.

En octubre, las asociaciones de padres y los directores de más de 150 escuelas, enviaron una carta al CEB donde pedían, tanto familiares como docentes, medidas de corto, mediano y largo alcance para garantizar una buena climatización de las aulas durante todo el año, pero sobre todo en verano. Sin embargo, no recibieron respuesta.

Ahora, a pocos meses de que empiece el verano, los padres piden medidas urgentes. “El calor está apunto de llegar, el cambio climático ya esta aquí y nuestros hijos están sufriendo”, ha dicho Xesca Gòmez, madre de una niña y miembro de la AFA.

A principios de septiembre, el Departament d'Educació repartió ventiladores a las escuelas tras las denuncias de docentes y familias por las elevadas temperaturas, que llegaron a superar los 40 grados. Sin embargo, esta solución no contenta a los padres, que aseguran que los ventiladores no son suficientes como “ya se demostró en septiembre y octubre”. “Cada escuela es diferente, algunas son más viejas y otras más nuevas. Se necesita hacer un análisis de cada centro para ver que necesitan”, ha explicado Xesca.

El Departament d'Educació dice que está estudiando qué medidas tomar, pero los padres exigen soluciones ya. Xavi Espuny, miembro de la AFA y padre de un niño, ha asegurado que el año pasado “hubo lipotimias de niños y docentes”. Además, ha acusado de que esto solo pasa en centros escolares y que en cualquier “centro de trabajo no se toleraría”. Por eso, reclaman que se realicen auditorías climáticas en todas las escuelas para que el Conscorci vea “como sufren nuestros hijos”.